Roma...

Antes de venir a España, conversé con varias personas. Una de ellas fué mi sacerdote que se encontraba trabajando en Roma para el Vaticano. Es una persona muy jovial y muy alivianado. No es un sacerdote común, en cuanto a que no es el típico del sermón y las palabras propias.

Cuando se enteró de que viajaba a España, me extendió una invitación para asistir a la audiencia del papa. No soy una persona muy religiosa, pero también sé que no siempre se tiene la oportunidad de verlo de cerca. La condición era que tenía que ser un día miércoles y estar a más tardar a las 7:00am en Piazza St. Pietro.

Nos aventuramos a Roma, en un vuelo de Ryanair... nuuuuunca vuelvo a viajar por esa aerolínea; aunque para ser sincera los aero-hermosos de Roma-Madrid, Dios de mi vida!

Nos hospedaron en una Domus-Carmelitana, eso significa que es una casa de las carmelitas, como una residencia religiosa más o menos. La primera noche, el padre nos mandó a visitar Campo d' Fiori, lo que yo pensé era algo parecido a la Plaza Cataluña de Barcelona, osea que tendría jardínes, monumentos, y esculturas... Digo, estando en la ciudad Eterna... Campo d' Fiori, es... digamos una plazola donde hay algunos bares, y jóvenes "pisteando" a mitad de calle, sin que nadie les diga ni madres... Pues también nos envió a Piazza Navona, que es... prácticamente lo mismo, con la diferencia de que aquí si hay monumentos, como la Fuente del Neptuno.

Se llegó el miércoles y la cita en Piazza St. Pietro. Casi nadie tiene la oportunidad de contemplarla vacía, por lo que me considero privilegiada. Hicimos nuestra respectiva fila, y al momento de entrar... Que nos mandan a la basilica de St. Pietro, cuando nosotras teniamos que tomar la audiencia en el Salón destinado para la gente nice, pues hicimos fila dos veces porque se empelotaron los de la seguridad del Vaticano y supongo gente de coordinación... Así, que cuando ya nos iban a hacer dar una segunda vuelta, que se aparece uno de los chacas y regaña a un tipo que ya no estaba dejando entrar a las personas a la basílica.



Total entramos y una amiga pudo tomar de la mano al papa, y yo pues le agarré la mano a mi amiga, por eso de la osmosis verdad! jajajaja! Fue una experiencia muy bonita, en cuanto a que no siempre se puede rezar con el mismísimo Papa en persona.

Al día siguiente emprendimos nuestro vuelo a Madrid, que en realidad fue mucho más grato que el primero, ya que como dije, ahora nos tocaron "Aeromosos" y estaban muy wapos, y eran muy coquetos, así que me bajé del avión enamorada.

Obviamente, durante la estancia en Roma, no pudo faltar la visita a todos los puntos de interés, que gracias al Padre Mendez tomamos el camionsito rojo para hacer todo el recorrido. Luego La visita obligada al Coliseo, que en realidad es una magnificencia de la arquitectura. Me dá risa, porque muchos imaginamos las cosas antes de verlas, y aunque lo imaginamos más grande, no deja de transportarte a otras épocas.